Aunque a mí me pase como a Rosendo, y tenga la impresión de que no me escucha nadie, este año voy a escribirle la carta a los Reyes Magos.
A sus Majestades los Reyes Magos de Oriente. (lo de Queridos ya lo veremos pasado mañana)
Señores,
Antes de comenzar con mis peticiones querría poner en conocimiento de sus realezas un hecho que, aunque puedan considerar intrascendente, es de vital importancia para el buen hacer de esta nuestra retomada relación: Yo, soy monárquico.
Y soy monárquico por una cuestión de admiración hacia la inteligencia de los reyes. Uno no es rey porque el pueblo lo ha querido, como ocurre con esos impresentables presidentes de repúblicas que caminan por el mundo y que se han ganado el poder a base de mentir, mentir, mentir y mentir cual concejales. No, uno no es rey porque sepa mentir más y mejor que nadie, uno es rey por la gracia de Dios.
Por la gracia de Dios... ¿No les parece un plan perfecto?... ¡es genial!... ¡sublime!... ¡digno de mentes privilegiadas!
Ustedes no mienten, ponen la baraja sobre la mesa con todas las cartas boca arriba: yo soy rey porque Dios lo ha querido así, y si no te sometes a mi mandato... ¡al Infierno vas!
Bueno, y una vez mostrada mi desinteresada admiración hacia sus personas, paso a hacer mis peticiones o, mejor dicho, mi petición ya que yo no soy egoísta como esos presidentes de repúblicas corruptas que antes mentaba y no voy a pedir tres regalos, pediré sólo uno.
Majestades... quiero que me traigan carbón.
Sí, carbón, mucho carbón, todo el carbón del mundo. Carbón... Carbón... Carbón... Que rima con Borbón (que gran familia).
Ustedes se preguntarán la causa de tan extraña petición; ¿por qué este niño náufrago pide aquello que siempre llevan a los niños malos, aquello que ningún niño quiere?
Pues muy sencillo: primero, no tan niño, ¿vale?; segundo, tengo un presentimiento: 2007 será, por fín, el año en el que la maldad triunfará, el año de los malos.
El Doctor Maligno apretará el botón y el mundo se irá a tomar por culo, incluyendo él, que además de maligno es gilipollas.
Supermán se romperá una cadera estando de vacaciones en Benidorm, y la Seguridad Social española le pondrá una prótesis de kriptonita, con la consiguiente perdida de sus poderes y de la admiración del pueblo americano que, apesar de todo, seguirá viniendo a Pamplona a hacer el gilipollas en los San Fermines (Ay, Manolete, si no sabes torear pa'que te metes).
A Bond, James Bond, el inexplicablemente nunca bien ponderado Tiburón de Moonraker le dará de hostias hasta decir basta, y le partirá la cara de tal manera que quedará afeado para siempre. Su perdida de encanto hacia las mujeres le llevará a darse a la bebida por lo que será despedido por Su Majestad la Reina (que gran mujer, como todas las reinas) y terminará vagando por las calles, pidiendo en el metro (es triste pedir, pero más tristes son ustedes), y bebiendo briks de vino barato. Agitados, no mezclados.
A Indiana Jones le capturarán los nazis y le meterán, en pelotas y sin látigo, en una V-2 con destino Londres donde, por cierto, Jack, el destripador, estará seccionando la yugular a Sherlock Holmes mientras el Capitán Garfio le abre en canal las tripas a Peter Pan.
Darth Vader con su espada laser cortará en finas lonchas al pesado de Yoda, que tan sabio que se cree que no sabe ni hablar, el muy gilipollas. Luke Skywalker y la princesa Leia cometerán incesto, y Han Solo se convertirá en un puto Yonki que irá dando palos en las gasolineras espaciales con su recortada laser. Chewaka será su camello.
Los 4 fantásticos terminarán trabajando en el circo de Ángel Cristo, fracasando noche tras noche, actuación tras actuación, lo que les llevará a convertirse en comida para los pobres leones del enano ese. Batman hará de hombre bala, y Robin de la chica que es cortada en dos por el mago cutre.
Petete reconocerá que su libro gordo lo escribió un negro, que él no sabe juntar dos letras seguidas sin equivocarse, y que mató por celos al prometido de la chica esa que decía "el libro gordo te enseña, el libro gordo te...". que, por cierto, en la infancia no te das cuenta de esas cosas, pero que buena que estaba la tía. Tal vez también se la pida a vuestras majestades el año que viene. Antes de que termine el año Petete será violado por los siete enanitos de Blancanieves en las duchas de prisión, donde habrá compartido celda con el ratoncito Pérez, que cumplirá condena por allanamiento de morada y robo. Todo ello con nocturnidad y alevosía.
Etcétera, etcétera, etcétera.
Y yo quiero que cuando pase, cuando a lo largo del 2007 el mal triunfe, pueda demostrar que soy uno de los suyos.
Esto es todo. Gracias por anticipado.
A.L.R.P. de V.M.
3 mensajes en la botella:
Pelota!!...más que pelota!...oportunista!!...que te crees, que por darles coba te van a traer lo que tú quieras? ( oye, si funciona, me lo cuentas...es que tengo yo un par de cosillas para pedir y este sistema del peloteo todavía no,lo he usado)
Ay! Señor náufrago... ¿no leyó el post de la Crazy? Siento ser yo la que le de la noticia pero... LOS REYES MAGOS NO EXISTEN!!!
Los reyes magos... son... son... son los padres!
Lo siento
Besos
PD: En mi casa, los "Reyes" dejaron para usted un paquetito... creo que eran unos calcetines de esos con un dibujo de unas raquetas cruzadas...
Encantada de toparme contigo en este mundo bloguero. Que decirte de mi y mis pajas mentales (siempre basadas en realidades) daría para muchos post... Tenemos por el momento una cosa en común Cralos, soy una amante de los puntos suspensivos; a partir de ahora quiero enamorarme también de los paréntesis.
Vuelve cuando quieras a visitarme.
Un Beso,
Lena.
P.D. Como los Reyes Magos te hayan traido todo lo que has pedido en esa carta, te convierto en mi ídolo!
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