martes, 6 de diciembre de 2011

Lustrando la palangana


Ayer, 5 de diciembre de 2011, Diario de un náufrago en una palangana cumplió cinco años.

Sí, cinco años.

Parece que fue ayer cuando nació Diario de un náufrago en una palangana. Y parece que fue ayer cuando Diario de un náufrago en una palangana cumplió cinco años.

Bueno, en realidad fue ayer. 

295 entradas (esta es la 296) en cinco años. No parecen muchas.

Quería haber publicado la entrada 300 el día que Diario de un náufrago en una palangana cumpliese 5 años, pero en Diario de un náufrago en una palangana somo así: un puto desastre.

Para celebrar este lustro de vida Dominga encargó una tarta, y le dijo al maestro pastelero que pusiese Love and Peace, que aquí somos muy hippies.

Y éste fue el resultado.




Así que nada, larga vida a Diario de un náufrago en una palangana; Dios bendiga a los pasteleros sordos, adormecidos, desconocedores de la lengua materna de Shakespeare, o tal vez simplemente punkies; y, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, felicidades a todas las Anas que lean este humilde y lustroso blog.

10 mensajes en la botella:

Belén dijo...

¡¡pues muchas felicidades, desastre!!

besicos

rogue dijo...

Muchas felicidades, oiga.
Y póngase las pilas con las actualizaciones, no? que la estadística de 5 años/ menos de 300 artículos es un poco escasa...dicho desde el cariño, eso sí.
La forma de la tarta, que no acabo de adivinar, me perturba profundamente.

Anónimo dijo...

Y que cumplas muchos más, como suele decirse. Por otra parte, tal vez los pasteleros te hayan hecho un favor: si tienes a tiro a alguna Ana igual te coronas.

Irreverens dijo...

¡¡FELICIDADES!!
:D

Que cumplas muchos más, y yo que te lea.
;)

Un abrazo gordo. Besos para Dominga. Ah, y recuerdos a la tal "Ana Peace".
XD

Trasto dijo...

Un lustro... ¡cómo pasa el tiempo!

Si parece que fue ayer cuando dejé mi primer y temeroso comentario en una botella en la orilla de su palangana, con miedo (¿era miedo o esperanza? hummm) a que saliese por detrás de una palmera un pequeño demonio rojo y me mandase directamente al infierno.

Un lustro ilustrando, con todo lo que ello significa...

Felicidades al Náufrago por no abandonar la isla, a Dominga por encargar la tarta, al pastelero por la sordera que dio pié a felicitar a Ana y a perturbar la mante de Wen de ésa manera y a las madres que les parieron a todos.

Y que "lustre" muchos más...

Miguel Baquero dijo...

Jua jua jua, qué bueno ese pastelero. Enhorabuena pese a todo y que la tarte estuviera rica, pese a todo también

Anhónima dijo...

¿Lo ve? A ná que uno se equivoca… Yo me hubiera quedado a cuadros al descubrir el pastel. Usted hace una foto y actualiza.
Felicidades Náufrago.

Carlos Añejo dijo...

Muchas gracias a todos por sus lustrosas felicitaciones.

Y lo siento, pero no queda tarta.

Anónimo dijo...

Muchas felicidades!!!!!!!!5 años y nueva palangana...

Kim dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.