jueves, 14 de diciembre de 2006

La extraña y sorprendente vida del hijo de Robinson Crusoe

No tiene que ser fácil ser el hijo de Bob Dylan, dedicarse a la música, y no morir en el intento. Pero Jakob Dylan lo ha hecho. Y tengo que reconocer que no lo hace mal. Los Wallflowers, que es el grupo que él lidera, suenan bien.

Y tampoco tiene que ser fácil ser el hijo de Robinson Crusoe, dedicarse al naufragio, y no morir en el intento.

No, yo no soy el hijo de Robinson Crusoe, el más grande náufrago que ha existido a ambos lados de la línea del ecuador, y es mejor así. No me puedo imaginar lo dura que hubiese sido mi infancia si hubiese sido su hijo.

- ¿Mamá, cuándo va a venir papá a casa?.
- Pues hijo, se fue ayer a trabajar de náufrago así que hasta dentro de veintiocho años no vuelve.
- Joder, me había prometido llevarme al Burguer King cuando volviese del trabajo....
- ¡Ni Burguer King ni leches, cómete las lentejas!.

Que no entiendo por qué Daniel Defoe tuvo a su Robinson veintiocho años en una isla si Alexander Selkirk, que es el náufrago real en el que Defoe basó su novela, sólo estuvo cinco años perdido en una isla del Pacífico. La crueldad del escritor, supongo, que se cree con patente de corso para hacerle a sus personajes todas las putadas que le vengan en gana sólo por el intrascendente hecho de que los ha creado él.

¡Malditos escritores malditos!.

Volviendo con el hijo de Crusoe, creo no equivocarme si afirmo que lo del Burguer King es lo de menos, después de todo no es más que comida, y por otro lado las lentejas con un buen chorro de vinagre no están tan malas, lo peor sería la humillación pública a la que me vería sometido todos los años cuando el primer día de colegio la seño nos preguntase, entre otras cosas, que yo nunca he entendido ese afán de los maestros de hacer y hacer y hacer preguntas a todas horas, a que se dedican nuestros padres.

- Mi padre es policía.
- El mío bombero.
- El mío es Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos.
- El mío funcionario.
- El mío es náufrago.
- ¡Tu padre es un muerto de hambre!.
- ¡Tu puta madre!.
- ¡Y un perdido!.
- Que cabrón.

No, por nada del mundo me hubiese gustado ser hijo de Robinsón Crusoe.

Además, si yo fuese el hijo de tan insigne náufrago y tuviese que seguir los pasos de mi padre seguro que al nativo que me encontrase en mi isla le llamaría lunes, porque yo soy así de gilipollas, y me tendría que pasar veintiocho años pegado a un lunes, y no a un viernes como mi padre. Que digo yo, ¿dónde iría Robinson Crusoe con Viernes un sábado por la noche?. ¿Nunca se lo han preguntado?. Yo sí, y Ian Whitcomb también. De gente rara está el mundo lleno.

Por cierto, y ya con esto termino y les dejo tranquilos, el título completo de la novela Defoe era "La vida y las extrañas y sorprendentes aventuras de Robinson Crusoe, marinero de York" que trasladado a un dominio de internet como blog de esta comunidad sería :
perdonen, necesito una pausa para tomar aire...
Que es, con diferencia, mucho más largo que el mío.

Pero como no existe dicho blog seguiré teniendo, pese a quien le pese, el dominio más largo del mundo y seguiré siendo, muy a mi pesar, un náufrago en una palangana.

Ian Whitcomb preguntándose dónde iba Robinson
Crusoe con Viernes un sábado por la noche.



2 mensajes en la botella:

Anónimo dijo...

Si yo fuese una náufraga, y me encontrase a un compañero/a en mi palangana, le llamaría Jueves, comeríamos lentejas con vinagre todos los primeros jueves del mes, y dejaría que él me llamase a mí como le diese la gana. Total... si no hay nadie más en la isla, ¿que más da el nombre? Si alguien habla, y no eres tú, será el otro/a...

Anónimo dijo...

Meggggde!!..es la segunda vez que entro, había dejado un coment, pero no ha salido, y ya estoy de los nervios con el maldito internete de las narices...
Ommmm,ommmmm,ommmmmm....vale, me voy calmando. Mañana vuelvo y dejo la chorrada de turno,que hoy no doy pá más.